“Admitimos que éramos impotentes ante el alcohol, que
nuestras vidas se habían vuelto ingobernables.”
Admitir que somos títeres de una adicción en este caso ante
el alcohol, se nos hace muy difícil, porque el admitir una derrota es algo que
las personas poco hacemos, siempre hay un gran ego que nos sega y eso de
admitir que nuestra vida es ingobernable y que estamos atrapados por el alcohol,
no es del agrado del alcohólico por que siempre pensamos que nosotros dominábamos
el alcohol y cuando nuestros familiares
nos corregían, el ego y orgullos se nos
desbordaba diciendo que nosotros no teníamos problemas con el alcohol, esta
muralla virtual que nosotros mismos levantamos durante tanto tiempo es la misma
que no nos dejaba admitir la derrota total ante el alcohol, y este es el primero obstáculo a derrotar por
todo enfermo alcohólico, si no nos rendimos ante nuestro muro virtual y nos
podemos humildes a derribarlo pedazo a pedazo, no seremos capaz de lograr una recuperación
exitosa dentro de nuestro proceso.
Este primero paso que se usa en AA es bastante aplicable en
muchas áreas de nuestra vida, digamos que tienes problemas con otra adicción,
una manía, problemas con la conducta etc. En mi caso que soy una persona no alcohólica y
que nada mas soy hijo de un alcohólico, el programa lo aplico en mis defectos
de carácter, mi problema es la neurosis, y un día llegue a alcohólicos anónimos
tras la invitación de una amigo muy querido por mí a celebrar su primer año de
oro dentro del proceso AA, y en ese
mismo momento me di cuenta que yo podía dejar de ser dominado por mi
neurosis, aplicando el paso uno de Alcohólicos
Anónimos (AA), que también se una en Neuróticos Anónimos (NA) que es donde yo debería
estar, pero aquí esta el misterio, que nosotros podemos aplicar este sencillo
paso en una área que nos afecte y no es necesario que seas alcohólico, aceptar
la derrota ante algo que te gobierna pero que en tu adentro lo quieres dejar,
hace que puedas liberarte y perdonarte a ti mismo y empezar de nuevo.
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